El 30 de abril de 2025 se cumplen 59 años de la elevación de la diócesis de Maracaibo al rango de arquidiócesis, un hecho histórico que marcó el fortalecimiento de la vida eclesiástica y cultural en el estado Zulia.
La diócesis del Zulia, originalmente creada el 28 de julio de 1897 por el papa León XIII, bajo las gestiones del monseñor Cástor Silva, había cumplido ya décadas de servicio pastoral cuando en 1953 cambió su nombre a diócesis de Maracaibo. Su crecimiento en fieles, infraestructura y dinamismo pastoral propició su transformación definitiva el 30 de abril de 1966, cuando Su Santidad Pablo VI, a través de la bula Regime Suscepto, decretó la creación de la Arquidiócesis de Maracaibo.
El primer arzobispo fue monseñor Domingo Roa Pérez, un hombre de profunda fe y compromiso pastoral que guió la arquidiócesis durante más de un cuarto de siglo, hasta cumplir la edad canónica en 1992. Bajo su liderazgo, la arquidiócesis experimentó una expansión notable en obras parroquiales, educativas y sociales, cimentando su papel como una de las principales circunscripciones eclesiásticas del país.
Tras su retiro, fue designado en 1992 monseñor Ramón Ovidio Pérez Morales, quien asumió el cargo en 1993 con el espíritu renovador de la nueva evangelización propuesta por el papa Juan Pablo II. Durante su mandato, se celebró en 1997 el Congreso Eucarístico de Maracaibo, acto central de la conmemoración del centenario de la diócesis zuliana, reafirmando la fe católica como parte esencial de la identidad regional.
En 1999, Pérez Morales dejó el cargo y, en el año 2000, fue nombrado arzobispo monseñor Ubaldo Ramón Santana Sequera, quien ejerció su ministerio pastoral hasta 2018, modernizando las estructuras diocesanas y fomentando una iglesia cercana a las realidades sociales contemporáneas.
Desde 2018, la arquidiócesis está bajo la guía de monseñor José Luis Azuaje Ayala, quien ha asumido el reto de conducir la Iglesia marabina en tiempos de transformación, apostando por una pastoral de cercanía, esperanza y renovación profunda.
El territorio eclesiástico del Zulia ha vivido múltiples configuraciones a lo largo de su historia. Inicialmente, parte del norte perteneció a la diócesis de Coro (1531), luego trasladada a Caracas en 1638, mientras que el sur estaba bajo la arquidiócesis de Bogotá. En 1777, con la creación de la diócesis de Mérida de Maracaibo, la región quedó subordinada a una autoridad más próxima, hasta que en 1897 obtuvo su autonomía diocesana.
Hoy, la provincia eclesiástica zuliana se compone además del Vicariato Apostólico de Machiques (elevado a diócesis en 2011), la diócesis de Cabimas (creada en 1965) y la diócesis de El Vigía-San Carlos del Zulia (establecida en 1994), confirmando el dinamismo misionero de esta región.
La historia de la Arquidiócesis de Maracaibo es, en esencia, la historia de la fe de su pueblo. Cada iglesia, cada comunidad, cada obra social y educativa impulsada desde esta estructura eclesial ha tejido parte del alma colectiva del Zulia.
Celebrar estos 59 años es rendir homenaje a los pastores que han guiado la grey zuliana y a todos los laicos comprometidos que, con su testimonio, han fortalecido la presencia de la Iglesia en los corazones y en las realidades de nuestra tierra.
Desde El Maracaibeño nos sumamos con alegría a esta conmemoración, reconociendo en la Arquidiócesis de Maracaibo un pilar fundamental de la cultura, la educación y el tejido social zuliano.
