Este 1 de mayo de 2025 se cumplen 43 años del fallecimiento de Julio César Borges Duarte, periodista, ensayista y cuentista zuliano cuya incansable trayectoria profesional dejó una profunda huella en la historia del periodismo latinoamericano.
Nacido en Maracaibo el 26 de octubre de 1926, Julio César Borges Duarte abrazó desde muy joven la pasión por la noticia y las letras. Utilizó múltiples seudónimos —Cóndor, Hitting, Sánscrito y Tartu— que reflejan la versatilidad de su pluma y su capacidad de adaptación a diversos géneros y públicos.
Su carrera comenzó en las páginas deportivas del diario Excelsior, y rápidamente asumió roles protagónicos en la vida periodística zuliana. Fundador de medios como Orbe, El Heraldo Democrático, Instantáneas (1933-1936) y Prensa Libre, también fue locutor en Radiodifusora Maracaibo y Radio Popular, abarcando así las nacientes plataformas de comunicación de su época.
Entre 1940 y 1946, consolidó su influencia como jefe de redacción de El Venezolano, fundador de El Demócrata y director de Tribuna. Su vocación gremial se reflejó en su rol como presidente-fundador de la Unión de Semanarios y Revistas del Zulia y como miembro fundador de la Asociación Venezolana de Periodistas y la Asociación de Escritores Venezolanos en el Zulia, sentando las bases de la profesionalización del oficio en la región.
Buscando siempre horizontes más amplios, Borges Duarte extendió su labor a América Latina, colaborando con prestigiosos medios como El Tiempo (Bogotá), El Telégrafo (Guayaquil), El Comercio (Lima) y O’Cruzeiro (Río de Janeiro). Su mirada crítica y su aguda narrativa captaron la atención de lectores en Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Uruguay, Brasil, Guatemala y Costa Rica, convirtiéndose en un verdadero cronista continental.
Exiliado en México tras el derrocamiento de Rómulo Gallegos, se mantuvo activo colaborando con diarios de prestigio como Excelsior, Novedades, El Nacional, y Revista de Revistas, así como con la emblemática revista Zócalo. En México, fundó también nuevas publicaciones como Ya, Pulso, Momento de México, Balance y México Marcha, demostrando su inagotable impulso editorial.
Su cuento «El expatriado» le valió el premio Hispano-Mexicano, y su obra periodística fue reconocida en dos ocasiones (1965 y 1969) con el Premio América Latina, otorgado en Buenos Aires, consolidándolo como una de las voces más autorizadas del periodismo de habla hispana.
En su regreso a Venezuela, Borges Duarte se desempeñó como secretario de prensa de la Cámara de Diputados, bajo la presidencia de Alirio Ugarte Pelayo, cargo en el que permaneció siete años, continuando a la par su colaboración con diversos periódicos nacionales y latinoamericanos.
Condecorado y honrado en vida, sus últimos años los dedicó a la recopilación de su vasta producción —artículos, cuentos, ensayos— en proyectos de libros y revistas como Actualidad Democrática. Sin embargo, la muerte lo sorprendió el 1 de mayo de 1982 en La Victoria, estado Aragua, truncando la culminación de su obra recopilatoria.
Hoy, 43 años después, Julio César Borges Duarte es recordado como un artista de la pluma, un forjador de medios de comunicación, un testigo incansable de los cambios políticos y sociales de América Latina, y un fiel defensor de la dignidad de la profesión periodística.
Desde El Maracaibeño, celebramos su legado y su ejemplo de vida dedicada al periodismo, la literatura y la libertad de expresión.