La mañana del martes 23 de septiembre, los espacios de la Biblioteca Luis Guillermo Pineda del Centro Venezolano Americano del Zulia (CEVAZ), en Las Mercedes, acogieron un emotivo encuentro con la poesía contemporánea zuliana. Se presentaron los libros Definitivamente viva, de Zulay Bravo, y Siento que el tiempo late en mis sienes, de Tibaldo Borjas, ambos editados por Sulraba del Lago Editores. El evento fue un homenaje a la palabra escrita, leída y sentida, pero también a la capacidad del verso para abrir caminos de introspección, memoria y resistencia.
Con una asistencia diversa, compuesta por estudiantes, escritores, lectores y gestores culturales, el encuentro fue un espacio para reafirmar el papel de la poesía como forma de conocimiento emocional y social. Lejos de las solemnidades habituales, la actividad tuvo el ritmo cercano de quienes hacen de la palabra un oficio de vida. Ambos autores, con trayectorias diferentes pero complementarias, compartieron con el público no solo sus textos, sino también las circunstancias personales y colectivas que los llevaron a escribirlos.
Zulay Bravo presentó Definitivamente viva, un poemario donde el cuerpo y la palabra se funden en una afirmación vital frente al silencio. Con una escritura íntima, directa y luminosa, Bravo entrega versos que tocan el duelo, el deseo, la maternidad, el cansancio y la voluntad de persistir. Sus poemas son declaraciones de vida en un contexto marcado por la incertidumbre, donde ser mujer, escritora y sobreviviente cobra un sentido político y poético profundo.
Por su parte, Tibaldo Borjas, con Siento que el tiempo late en mis sienes, ofreció una mirada reflexiva sobre la memoria, el paso del tiempo y la búsqueda de sentido en medio de las transformaciones sociales y personales. Su obra combina la experiencia del tránsito —físico y emocional— con una preocupación estética por el ritmo del lenguaje, el peso del instante y la construcción de identidad desde el margen.
Durante la actividad, ambos autores leyeron fragmentos de sus libros, comentaron sus procesos creativos y respondieron preguntas del público, en un ejercicio que privilegió la cercanía, el diálogo y la horizontalidad. Se abordaron temas como la escritura en tiempos de crisis, el papel de la poesía en el espacio público y el compromiso ético del lenguaje con su entorno.
Desde la organización, se destacó que esta presentación forma parte de una serie de actividades impulsadas por la Ruta Latinoamericana de Poesía, red internacional que promueve la circulación de obras y poetas del continente, con un enfoque inclusivo y territorial. En el caso del Zulia, la ruta busca proyectar voces locales que aporten nuevas miradas sobre la región, desde una escritura situada pero con vocación universal.
“Este encuentro fue una celebración de la palabra como forma de resistencia y ternura. En tiempos en que el ruido predomina, leer poesía es también un acto político”, expresó uno de los promotores del evento. “Estos libros no solo nos hablan de sus autores, sino también de todos nosotros, de nuestras fragilidades y esperanzas”.
El CEVAZ reafirma con este evento su vocación como espacio de encuentro cultural, apostando por actividades que promuevan el pensamiento crítico, el diálogo intercultural y la sensibilidad artística. Tanto Bravo como Borjas agradecieron la oportunidad de presentar sus obras en un entorno que promueve el acceso libre y plural al arte y la literatura.
El evento concluyó con una breve conversación colectiva sobre la necesidad de seguir generando espacios para la poesía en la ciudad, más allá de las fechas conmemorativas o los circuitos editoriales tradicionales. La invitación fue clara: leer, escribir, escuchar, compartir.