El aspecto físico de las personas va variando a lo largo de toda su vida según van envejeciendo. Por supuesto, cada persona madura de una forma distinta, pero hay una serie de rasgos comunes que se repiten la mayoría de las veces y que es necesario tener en cuenta para poder dibujar personas de cualquier edad. En esta lección veremos esos rasgos para poder plasmarlos en nuestros personajes.
Vamos a dividir la vida de las personas en seis etapas:
- Bebé
- Niño
- Adolescente
- Joven
- Maduro
- Anciano
Veamos las principales características de cada una de esas fases.
Bebés
Se trata de niños y niñas que aún no saben andar por lo que deberemos dibujarlos tumbados, en brazos, sentados o gateando. Los bebés no tienen diferencias de género, a no ser que estén desnudos, obviamente. Es decir, los rasgos y estructura son iguales para niños y niñas, aunque podamos dibujar elementos externos para diferenciar el género (como pendientes para las niñas).
Las características principales son:
- Cabeza grande, ojos grandes, boca y nariz pequeños. Cara redonda. Casi sin pelo.
- Cuello muy corto. Hombros caídos.
- Brazos cortos, solo llegan a la cadera (en la edad adulta llegan a mitad del muslo).
- Piernas cortas, de la misma longitud que el torso. Piernas separadas entre sí, muchas veces como consecuencia de llevar pañales.
- Articulaciones poco marcadas, con bastante grasa.
Niños
Los niños tienen características semejantes a los bebés pero ya podremos dibujarles erguidos, de pie, corriendo o jugando. Cuanto más jóvenes sean, más compartirán sus rasgos con los bebés.
- La cabeza sigue siendo grande, con ojos grandes y nariz y boca pequeños. Cuanto más cerca está la nariz de los ojos, más joven parece el niño. Cara redondeada. El pelo ha crecido. Cuanto más joven es el niño, más tendencia tiene al pelo rizado (suave, con tirabuzones)
- El cuello se va alargando: de ser casi inexistente en los bebés a alcanzar la proporción adulta en la naturaleza. Los hombros siguen estando caídos.
- Los brazos siguen siendo cortos.
- El torso es ancho a la altura de las caderas. No tienen cintura.
- Las piernas van creciendo según van haciéndose mayores. Pueden haber dado un estirón y que la ropa les quede corta.
- Más delgados, van perdiendo la grasa propia de la lactancia.
Adolescentes
La adolescencia marca el cambio de niño a adulto e incorpora características de ambas fases. Aparece en algunos casos el acné.
- La cabeza tiene el tamaño adulto pero los ojos siguen siendo grandes. La cara sigue siendo redondeada, aunque se alarga un poco. Crece la nariz. Cejas más pobladas.
- El cuello tiene su longitud adulta y los hombros siguen estando un poco caídos. La postura es algo desgarbada.
- Brazos y piernas tendrán la proporción adulta.
- Insinuaremos las formas en las mujeres (pecho y cintura) solo ligeramente.
Jóvenes
En la juventud las formas del cuerpo están totalmente claras, Las mujeres tendrán el pecho, cintura y caderas más marcados y los hombres estarán más musculosos. Las caras se vuelven más angulosas y afiladas perdiendo el aspecto infantil.
- Se pierden los rasgos de la adolescencia.
- Se tonifica el cuerpo y aparecen las curvas en el caso de las mujeres. Hombros rectos.
- En los hombres, se endurece el cuerpo.
- Las formas son más angulosas, menos redondeadas.
Maduros
Llegada la madurez, el cuerpo se ensancha por todas partes, principalmente en el cuello. Dibujar un cuello grueso nos ayuda a mostrar que un personaje está en esta fase de su vida. Los hombres suelen ensanchar el abdomen y las mujeres la cadera, sobre todo, si han tenido hijos. Cuanto más cerca de la vejez, las mujeres también ensanchan la cintura. Los rasgos de la cara se endurecen y aparecen arrugas.
- Cuerpo ensanchado.
- Arrugas en la cara.
- Papada.
- Brazos caídos.
Vejez
La vez es la etapa de caída libre. Se acentúan las arrugas y la piel se va descolgando por distintas partes del cuerpo.
- Espalda encorvada. Hombros caídos.
- Cejas más espesas.
- Ojos más pequeños, con los párpados caídos sobre ellos.
- Menor tamaño, menguamos.
- La nariz y las orejas siguen creciendo.
- Canas y pérdida de pelo.
- Articulaciones flexionadas.
Aplicación
Estas características nos pueden vales para crear nuestros propios personajes teniendo en cuenta la edad que deben aparentar, pero también, si estamos dibujando un retrato de una persona, podemos reforzar o camuflar los rasgos característicos de una etapa si queremos que esa persona parezca más joven o más madura.
Un ejercicio interesante es dibujar al mismo personaje a lo largo de su vida a través de esas 6 fases. Tenemos que hacer que se identifique que es la misma persona manteniendo los rasgos pero teniendo en cuenta las características que hemos visto en esta lección. Un truco es buscar algún elemento que pueda mantener a lo largo de toda su vida (gafas de una cierta forma, un lunar en la cara, etc).

Personaje durante las 6 edades de su vida
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